Arévalo: iglesia de Santo Domingo de Silos
‘Notable obra, que se atribuye, aunque sin confirmar, a Pedro de Salamanca (bastante activo en Arévalo, por lo que se ve), es el Cristo ‘verde’ al que acompaña una Dolorosa. No sólo se puede especular con ese necrófilo realismo del cuerpo muerto, que realmente impresiona, sino también con el detalle de que ese color, el verde, suele estar asociado con la figura de la Diosa. Recordemos al respecto, que a las antiguas Maters se las encendían velas precisamente de ese color. Se encuentra situado en uno de los retablos laterales de la iglesia de Santo Domingo de Silos, en Arévalo. Templo visitable, por cierto, y donde se recomienda proveerse de monedas de 50 céntimos para iluminar parte de la nave y los retablos’. [Cuaderno de Notas del Caminante, Arévalo, 28 de diciembre de 2016] S ituada a escasos metros de la iglesia del Salvador, pero en el fondo, como aquélla, lamentablemente muy reformada, no es de extrañar que en lo referente a ésta iglesia de Santo Domingo de Silos, ll